Pasar la frontera

En la población de Gargantilla, aprovechando el Check Point de la ruta senderista, se instaló un puesto de información en el que entregamos un Pasaporte con información sobre la actividad «Pasar la Frontera».

Antes de la llegada a Segura de Toro, l@s senderistas se encontraron con un pequeño»Puesto Fronterizo», donde un «militar» informaba del tránsito de personas que se acercaban por el camino hacia la frontera.

Unos metros más tarde l@s senderistas llegaban al Paso Fronterizo, donde el camino estaba completamente cortado por vallas con concertinas reales que impedían su paso, obligándoles a cruzar por el pasillo central.

A la entrada y aprovechando la obligación de hacer una parada, se encontraba el primer panel de la exposición, con información sobre conflictos armados en el mundo y su repercusión sobre la población civil.

Justo al paso de la Frontera, dos funcionar@s fronteriz@s en sus mesas se encargaban de que todas las personas sellaran sus pasaportes recordando que en esta actividad  #ningunserhumanoesilegal, tuviera o no dorsal de la ruta senderista.

En colaboración con la CONGDEX y AEXCID, se veían en la frontera sus figuras saltando, exposición que intenta promover e impulsar procesos de trabajo en red entre las organizaciones miembros en alianza con otros actores sociales, en pro de la defensa de los derechos humanos, la solidaridad y la justicia social global.

Cincuenta metros más allá de la frontera, l@s participantes se encontraban con otro «militar» que les requería de nuevo la documentación en regla, para darle más realismo a la acción y hacer sentir a l@s senderistas el estricto control de fronteras.

Ya en Segura de Toro todas las personas con el pasaporte sellado pudieron acceder al «Campo de Refugiados» y fueron informadas sobre los pasos a seguir dentro del campo.

Dentro del «Campo de Refugiados» se encontraron con un photocall con el texto #ningunserhumanoesilegal y una fotografía de Mai Saki tomada en Idomeni.

En colaboración con el proyecto Zaleando Barreras, financiado por AEXCID, se entregaron Comidas del Mundo a todas las personas que pasaron por el Campo. Taboulé, hummus y consomé de jengibre que se racionó entre tod@s l@s participantes.

A la salida del «Campo de Refugiados», y aprovechando que l@s senderistas se detenían a degustar las comidas del mundo, se situaron los otros cuatro paneles de la exposición con información y fotografías de Mai Saki.

Junto al último panel de la exposición, que está dedicado a El tejido social como parte de la solución, situaron el puesto de Refugiados Extremadura las compañeras que se acercaron desde Plasencia para colaborar con la acción y entregar información sobre su proyecto.